Pero si andamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros.-1 Juan 1:7
El tema que voy a tratar es la comunión con Dios: cómo alcanzarla y cómo mantenerla de forma tan constante como seamos capaces en este mundo... El tema es elevado y copioso [y] se habla mucho de él. Pero me temo que no se entiende tan bien y se experimenta menos, aunque el tema se relaciona principalmente con la experiencia cristiana... Ahora bien, esta es la manera de tener comunión y compañerismo con Dios, como dice el texto: "Si andamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros".
Ahora bien, por "unos con otros", algunos dicen que el apóstol se refiere a los santos a quienes escribe: "Nosotros y vosotros tendremos comunión, nosotros los apóstoles y vosotros los creyentes"... Pero debemos entender más bien que el apóstol habla aquí de la comunión que Dios tiene con su pueblo y ellos con él... Un antiguo manuscrito griego tiene en el texto "con él", es decir, "Dios y nosotros tendremos comunión unos con otros". Y [así] debemos entenderlo en ese sentido. Porque el apóstol no está hablando aquí de la comunión que los santos tienen entre sí, sino de nuestra comunión y compañerismo con Dios, como en el versículo 6: "Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos y no hacemos la verdad". Luego añade: "Pero si andamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros".
Ahora procederé a hablar del tema en sí: ¿Qué es esta comunión con Dios? La palabra en el griego, [traducida] comunión... significa "común". Por lo tanto, importa algo que es común y mutuo entre Dios y nosotros, como la comunión entre los hombres importa algo mutuo en cada lado. Así, nuestra comunión con Dios es activa o pasiva: activa en lo que pasa de nosotros a Dios, y pasiva en lo que se comunica de Él a nosotros.
1. Activa por nuestra parte: Consiste en las operaciones divinas de nuestras almas hacia Dios, cuando las facultades del alma tienden hacia Él y terminan en Él, cuando la mente se ejercita en la contemplación de Él y la voluntad en elegirlo y abrazarlo, y cuando los afectos se fijan en Él y se centran en Él. Por nuestros deseos lo perseguimos, por nuestro amor nos apegamos a Él, y por el deleite lo aceptamos y nos solazamos en Él.
2. Pasiva por parte de Dios: Nuestra comunión con Dios consiste en que participamos de Él y en que Él se comunica a nosotros. Esta comunicación de Dios a nosotros en nuestra comunión con Él es especialmente en estas tres cosas: luz, vida y amor.